Lava la ropa del bebé por separado: debes lavar su ropita en una colada separada de la del resto de la familia, especialmente durante sus primeros meses cuando su piel es más sensible.
Tiende la ropa del bebé nada más terminar la lavadora: una vez finalizado el ciclo de lavado, no olvides tender inmediatamente la ropa para evitar que las prendas se arruguen y cojan malos olores.
Debes lavar la ropa del bebé por separado a la del resto de la familia, ya que así evitas que entren en contacto con bacterias y suciedad de las prendas de los adultos, y protegerás la piel de tu bebé de irritaciones y alergias.
Es necesario actuar rápidamente para eliminar las manchas en la ropa de bebé que ocurren de un momento a otro cuando no estás en casa. Lo primero que puedes hacer es retirar cualquier exceso de sustancia derramada con una cuchara o paño limpio.
Antes de lavar la ropa, separa la que es de bebé de la ropa de adultos y de otros niños para evitar la transferencia de suciedad y gérmenes.
La elección correcta de detergentes y suavizantes para la ropa de tu bebé es critical para evitar irritaciones y alergias en su piel smart. Existen varias marcas y tipos en el mercado, pero no todos son apropiados para los recién nacidos. Aquí te damos algunos consejos y recomendaciones.
• Agua caliente: aunque parezca más efectiva para eliminar gérmenes, no es recomendable para lavar la ropa de bebé debido a la sensibilidad de su piel.
Cuidado con las etiquetas de las prendas. Recuerda retirar la etiqueta o elementos que puedan rascar o hacer daño a tu recién nacido.
Para optimizar el proceso de lavado y cuidar adecuadamente la ropa de tu recién nacido, es recomendable clasificar las prendas según su tipo y nivel de suciedad.
Sabemos que dijimos anteriormente que podrías ignorar la etiqueta de cuidados, pero la ropa de lana es cara, por lo que esta es la excepción. Algunas prendas de lana pueden requerir lavado a mano, así que no las tires en el cesto con los pijamas y los mamelucos.
La mejor manera de secar la ropa de bebé de lana es plana, en un tendedero si es posible o sobre una mesa de lo contrario.
Querrás limpiar la lavadora y la secadora al menos una vez al mes usando los ciclos de “limpieza de la bañperiod” o “desinfección”.
Una vez que la ropa esté limpia y seca, guárdala en un lugar fresco y libre de humedad. Utiliza bolsas de algodón o cajones limpios para proteger las prendas de insectos y polvo. Revisa periódicamente la ropa para descartar aquellas que ya no le sirvan a tu bebé.
Los tejidos lavables también se pueden frotar y enjuagar con agua corriente. Repite los pasos anteriores si ves que la mancha no cede. Para finalizar lava la Jabón para ropa de bebé delicada prenda como sueles hacerlo y listo.